miércoles, 6 de junio de 2007

EN EL ELEVADOR

El elevador se quedó sin electricidad, me tragó y me asfixia... Estuve esperando un rato, que alguien llegara a salvarme. Todo se quedó quieto, silencioso. Nadie abrió la puerta, parece que el edificio se hubiese quedado abandonado... Doy vueltas en apenas 1 metro cuadrado, llorando, agobiada, desesperada, aguantando. Por momentos me detenía y me sentaba y volvía a esperar hasta aburrirme... Debo salir de aquí. Por fin se me ocurre dejar de esperar y encontrar el modo de escapar de estas entrañas...

martes, 5 de junio de 2007

SIGO AQUÍ

Ella sigue entera, ahí, en medio de cada trozo del pasado, continúa de pie... Su mundo pudo haberse fragmentado, el aire se tornó gris, pero ella sigue intacta... Pueden los ojos líquidos manchar su cara, nublar la visión, pueden los escombros espantarla, pero aún no han logrado aniquilarla... Sintió derrumbarse junto con todo, quizó desvaneserse igual que su todo, pero no lo logró. Sigue aquí, ella siempre con ella, nunca se abandonará...

SALIENDO

Me muevo debajo de mí, me deslizo a través de los escombros, te veo en cada pedazo, quisiera ver cada trozo otra vez en su lugar, se me derrite la mirada al contemplar todos estos fragmentos divididos... Sigo moviéndome, intento salir de este cuadro gris...

domingo, 3 de junio de 2007

COMIENZA EL VIAJE

Si la vida es un escenario cambiante donde los roles se van modificando conforme las historias evolucionan, comienzan y terminan, entonces efectivamente todo es ficción, y sin embargo, aún así duele...En cada historia nos vamos reconstruyendo, cada caída, cada final, cada inicio, es através de un nuevo yo mezclado con todos los yo vividos anteriormente. Después del huracán, comienza el proceso de reconstrucción de nuestros pedazos, esparcidos en el espacio,donde nos perdimos, donde nos retomamos, donde fuimos expulsados, a donde soñamos llegar.En ocasiones el salto al vacío, no es una elección, no había otra opción, el derrumbe, la destrucción te destroza y no tienes otra más que lanzarte. El miedo es tan intenso, la caída parece inminente y sin embargo, sólo estás siendo sacudido mientras el escenario cambia... No se trata de ser marionetas, sino de la capacidad de vislumbrar que la escena terminó, pero que comienza otra nueva, tan entretenida, tan dramática, tan fugaz, tan intensa, tan única y especial como lo fueron las anteriores... ¿Cuál será la historia?, nadie lo sabe, más que una parte interna que en el fondo sabe que rol está listo para interpretar.Tal parece que la vida es ficción, y aún así duele, y aún así nos encanta, y aún así podemos ser felices.
¿Estarás en la nueva historia, aparecerás?, no lo sé... Muy probablemente la escena comience extrañándote, con la desolación de tu ausencia. Muy probablemente la añoranza será evidente y el deseo de que regreses será recurrente. Pero algo aparecerá que será el plot de esta historia y entonces vendrá el giro, la sorpresa constante de la vida, el cambio cotidiano que te mueve de una dimensión a otra y te lleva a comprender porque tuvo que ser así. No comienzo en un nuevo set, estoy en el mismo que compartí contigo, me quedo con un chorro de cosas que le regalaste a mi vida y hoy son yo. Tampoco soy el personaje que sufre de amnesia y te tiene olvidado en otras vidas. Sigo siendo la vainilla que se diluyó en sal líquida cuando te fuiste, que sólo decidió poner distancia para poder volver a convertirse en concentrado puro de vainilla.
La escena comienza con el ingrediente principal, vainilla sola, más no desolada, aún te lleva en el equipaje, guardado en el baúl de su corazón. Está lista para teletransportarse al nuevo espacio, comienza el viaje...