Ahora sí me pusieron del otro lado y te la sacaste, me hiciste reír mucho:
"Y si estás llorando porque las cosas sentimientales no son como quieres, por qué no lloras también porque no tienes el dinero que quieres, por qué no lloras y le preguntas a la vida ¿por qué no soy igual de rica como Slim, por qué él y no yo???!!!!"
A veces en verdad que me haces ver las cosas tan sencillamente, que el agobio, el miedo, el enojo, vistos desde ahí, desde donde me paras, se ven tan pero TAN RIDÍCULOS!... Eso, precisamente eso, me encantaba de ti... Gracias!, te quiero, te quiero mucho!!!
jueves, 23 de agosto de 2007
domingo, 19 de agosto de 2007
AIRE
Empujo el marco de madera, está atascado. Es oscura y rasposa, está toda empolvada, pero yo recuerdo que sí se abría, un poco de aire es lo que necesito... Apenas se alcanza abrir una rendija e inmediatamente se cuela un frío helado, congelado... La cierro de golpe otra vez... Pero este olor, este olor tan familiar que me está ahogando, se ha formado ya una neblina, todo se ha condensado aquí dentro y necesitamos airear esto... Voy otra vez, salgo corriendo hacia la ventana y me estrello contra ella, se abre de golpe y yo casi caigo con ella. Se rompió el cristal, tengo sangre en las manos y el frío se puede sentir hasta en el húmedo de los ojos que se congelan... Entra el aire en ráfagas, como perrito contento, al que por fin le abrieron la puerta y lo dejaron entrar... Siento que me congelo y quisiera volver a cerrar para dejar todo calientito pero muerto como estaba. Y sólo miro, sólo miro como el viento viene desde lejos y recorre cada rincón, creería que con su fuerza va a desbaratar todo, pero en realidad lo único que pasa es que el olor está disminuyendo, es tu olor el que tengo que dejar ir, que salga y vuele junto con el viento que juega al entrar y salir... Te vas diluyendo sin que lo note, quisiera retenerte en algún rincón, pero no sé dónde estás, creía tenerte aquí guardado, en esta caja de corazón que aún huele a ti, pero al abrirla descubrí que no estabas, que sólo era tu olor... Airen esta casa, deja que se vaya el olor y lo llenaré de pura vainilla.
viernes, 17 de agosto de 2007
martes, 14 de agosto de 2007
MADUREZ O SIMPLE MIEDO?
¿Será el deseo de compartir la vida, de tener algo mucho más estable, de cuidar algo tan valioso como el vivir con alguien, no un síntoma de que se ha llegado al nivel, sino más bien que después de tanta y tanta diversión, le hemos perdido el gusto a la aventura y más bien tenemos el síndrome de quién se cae del caballo y nos morimos del miedo y más bien queremos asegurarnos de que ya no nos volvermos a lastimar?
Si es así, QUÉ TRISTE E IGNORANTE CASO!
Si es así, QUÉ TRISTE E IGNORANTE CASO!
MIEDOS?
Si los recuerdos son tan bellos, ¿de qué valen los cuestionamientos?, ¿realmente uno no debería dejarse llevar por esos sentimientos donde todo fluye y poner atención en todos los detalles que uno “debería” fijarse? ¿el fijarse en todo eso te garantiza una mejor convivencia, te augura el pode extender ese amor fugaz y trasportarlo hasta la eternidad?... ¿No serán sólo miedos, una estrategia más con la inútil intención de convertir lo fugaz en eterno?... Si existiera tal paliativo no habría principios y finales en todas estas historias de amor, ¿o sí?
TIENES EL NIVEL?
Si al primer bocado no reconoces la buena carne, quizás te falte mucho, ¿aún no estás al nivel?...
Habemos algunos que nos dedicamos a educar el paladar, habemos otros que de tanto probar acabamos por ya no reconocer lo frío de lo caliente... Hay sabores que te hacen gritar DE AQUÍ SOY!, hay otros que te engañan, primero son dulces, pero de final amargo. Los hay salados, acidulados, agridulces, amargos, picosos, sabrosos, simplones, spicy; de consistencia sólida, gelatinosa, líquida, suave, rugosa, rasposa. Hay sabores intensos, que permanecen en la boca, hay sabores apenas perceptibles, hay sabores que te hacen recordar otro sabor. Hay sabores que de inicio no te gustan y al rato eres adicto a ellos... Por momentos las variedades parecen infinitas, tan diversas e inacabables que es muy probable que en nuestra frente aparezca con mayúsculas "y si hay algo más rico???"... También está aquel que se la pasa comiendo las fusiones más delicadas y espectaculares que cualquier paladar desearía degustar, sin embargo, un buen día decide que ya se cansó y que ahora quiere tacos y memelas; bien dicen tú enséñame un buen culito y te diré quién está cansado de comérselo.
De tanto probar alguien sabe realmente lo que quiere o ya nos perdimos?... Cuándo te detienes, qué hace que te estaciones temporal o permanentemente?... Es por cansancio, por emoción, por impulso, o a conciencia?...
Costumbre vs novedad, diversidad vs único, estabilidad vs libertad... ¿Cuándo aprendimos que esos conceptos están peleados?... Que no lo único era lo más preciado y ahora resulta que "uno" amenaza con aburrirnos? Que no era más vale viejo por conocido que bueno por conocer? Que no todo este show de estudiar, la carrera, el trabajo es para tener "estabilidad"?
Somos tan contradictorios y tan complicados: quién no ha sentido pánico escénico al sentir la red venir sobre nosotros, con sus cuerdas asfixiantes y limitantes?, quién no ha salido huyendo sin darse cuenta, quién no ha encontrado las razones más sólidas para no lanzarse al abismo y se ha refugiado en la bendita libertad, la juventud, los amigos, la profesión, en fin, tantas cosas que uno quiere hacer antes de?... Quién no ha sentido los patéticos domingos donde no hay horas-camas que te den descanso, cuando las horas del día se van trazando lentamente secas, desoladas, sin nada que ver en la tv, ni película buena que te saque del abismo donde te sumergiste, ni compañía que se equipare con la que verdaderamente deseas?, quién no ha vagado por los malditos días eternos e inacabables de la desolación?...
Parece que de esto se trata el camino, de vivir todos sus lados, todos sus recovecos; ¿acaso el truco será no perderse en ellos y recordar que finalmente es un juego de roles, que por ello todo es temporal y fugaz?... ¿Dónde habré dejado las pinches reglas del juego donde nos explicaban cómo darle game over a los sentimientos, o mejor aún, cómo comer vidas y aumentar el nivel de energía de ellos y poder mutarlos en algo completamente nuevo?... ¿En dónde habrá quedado la ficha de mudanzas?, por aquí debe de estar....
Habemos algunos que nos dedicamos a educar el paladar, habemos otros que de tanto probar acabamos por ya no reconocer lo frío de lo caliente... Hay sabores que te hacen gritar DE AQUÍ SOY!, hay otros que te engañan, primero son dulces, pero de final amargo. Los hay salados, acidulados, agridulces, amargos, picosos, sabrosos, simplones, spicy; de consistencia sólida, gelatinosa, líquida, suave, rugosa, rasposa. Hay sabores intensos, que permanecen en la boca, hay sabores apenas perceptibles, hay sabores que te hacen recordar otro sabor. Hay sabores que de inicio no te gustan y al rato eres adicto a ellos... Por momentos las variedades parecen infinitas, tan diversas e inacabables que es muy probable que en nuestra frente aparezca con mayúsculas "y si hay algo más rico???"... También está aquel que se la pasa comiendo las fusiones más delicadas y espectaculares que cualquier paladar desearía degustar, sin embargo, un buen día decide que ya se cansó y que ahora quiere tacos y memelas; bien dicen tú enséñame un buen culito y te diré quién está cansado de comérselo.
De tanto probar alguien sabe realmente lo que quiere o ya nos perdimos?... Cuándo te detienes, qué hace que te estaciones temporal o permanentemente?... Es por cansancio, por emoción, por impulso, o a conciencia?...
Costumbre vs novedad, diversidad vs único, estabilidad vs libertad... ¿Cuándo aprendimos que esos conceptos están peleados?... Que no lo único era lo más preciado y ahora resulta que "uno" amenaza con aburrirnos? Que no era más vale viejo por conocido que bueno por conocer? Que no todo este show de estudiar, la carrera, el trabajo es para tener "estabilidad"?
Somos tan contradictorios y tan complicados: quién no ha sentido pánico escénico al sentir la red venir sobre nosotros, con sus cuerdas asfixiantes y limitantes?, quién no ha salido huyendo sin darse cuenta, quién no ha encontrado las razones más sólidas para no lanzarse al abismo y se ha refugiado en la bendita libertad, la juventud, los amigos, la profesión, en fin, tantas cosas que uno quiere hacer antes de?... Quién no ha sentido los patéticos domingos donde no hay horas-camas que te den descanso, cuando las horas del día se van trazando lentamente secas, desoladas, sin nada que ver en la tv, ni película buena que te saque del abismo donde te sumergiste, ni compañía que se equipare con la que verdaderamente deseas?, quién no ha vagado por los malditos días eternos e inacabables de la desolación?...
Parece que de esto se trata el camino, de vivir todos sus lados, todos sus recovecos; ¿acaso el truco será no perderse en ellos y recordar que finalmente es un juego de roles, que por ello todo es temporal y fugaz?... ¿Dónde habré dejado las pinches reglas del juego donde nos explicaban cómo darle game over a los sentimientos, o mejor aún, cómo comer vidas y aumentar el nivel de energía de ellos y poder mutarlos en algo completamente nuevo?... ¿En dónde habrá quedado la ficha de mudanzas?, por aquí debe de estar....
EL SECRETO ESTÁ EN NO DEJAR DE PASÁRSELA BIEN!
Las amigas siempre encuentran el modo de darle el giro necesario a las cosas. Aquí va un trozo de amistad directito desde el messenger:
Pos cuenta la historia que hace miles de años
pos existían los hombres de las cavernas que iban de cueva en cueva diseminando su semillita pa tener harta banda pa cazar mamuts
y en cuanto lo hacián,-gozoso el proceso por cierto, para que lo repitieran seguidito-
pos se iban a otra cuevita a seguir sembrando mija
y cuando era hora de cazar pues se juntaba la banda machina de las cavernas y le daban en su madre al elefante prehistórico
y le llevaban a sus viejas su tajada
y a sus críos
tons ellos se movían con singular alegría de una cueva a otra, de boca en boca y de beso en beso
porque ellos eran más románticos que los de ahora, supongo
y pos las hembras cavernícolas se aferraban a su machín cada que iba a ponerlas en su lugar y les dolía que se fueran porque se sentián protegidas con esos brazos juertes y esos sopes peludos que les quitaban el frío
todo hot hot hot
y cuando el otro se iba sin pena ni gloria namás echaban lagrimitas que ni cosquillas hacian al fuego
y ellos de aquí pallá de acá pallá y ellas esperando que su cavernero regresara a apapacharlas y darles retoños...
y seguimos con eso, a poco no?
A los dos besos ya no queremos soltar y ellos apenas tan probando si es su cavernícola o ven otras nalguitas pasar y les gustan más
pero hay algunos especímenes de esos que la prueba les gusta a la primera y les da hueva seguir probando
saben al primer bocado cuando la carne es buena
y esperemos que llegue uno de esos pero NO HAY QUE DEJAR DE PASÁRSELA BIEN!
Pos cuenta la historia que hace miles de años
pos existían los hombres de las cavernas que iban de cueva en cueva diseminando su semillita pa tener harta banda pa cazar mamuts
y en cuanto lo hacián,-gozoso el proceso por cierto, para que lo repitieran seguidito-
pos se iban a otra cuevita a seguir sembrando mija
y cuando era hora de cazar pues se juntaba la banda machina de las cavernas y le daban en su madre al elefante prehistórico
y le llevaban a sus viejas su tajada
y a sus críos
tons ellos se movían con singular alegría de una cueva a otra, de boca en boca y de beso en beso
porque ellos eran más románticos que los de ahora, supongo
y pos las hembras cavernícolas se aferraban a su machín cada que iba a ponerlas en su lugar y les dolía que se fueran porque se sentián protegidas con esos brazos juertes y esos sopes peludos que les quitaban el frío
todo hot hot hot
y cuando el otro se iba sin pena ni gloria namás echaban lagrimitas que ni cosquillas hacian al fuego
y ellos de aquí pallá de acá pallá y ellas esperando que su cavernero regresara a apapacharlas y darles retoños...
y seguimos con eso, a poco no?
A los dos besos ya no queremos soltar y ellos apenas tan probando si es su cavernícola o ven otras nalguitas pasar y les gustan más
pero hay algunos especímenes de esos que la prueba les gusta a la primera y les da hueva seguir probando
saben al primer bocado cuando la carne es buena
y esperemos que llegue uno de esos pero NO HAY QUE DEJAR DE PASÁRSELA BIEN!
domingo, 12 de agosto de 2007
LA VÍCTIMA AGOTADA
Estás en tantas cosas presentes y es que esas cosas ahora soy yo… La inundación terminó, los estragos parecen parte del pasado, simplemente que sigues aquí de una u otra manera, aprendo a seguir queriéndote en la distancia, a sentirte en los recuerdos, a extrañarte en los segundos que los ojos se me vuelven agua… No me odio por este estado, que parece sin mucho avance y que a la vez es tanto… Tiempos de raspadas, de caídas y levantadas, golpeando de un lado a otro, tambaleante he ido caminando, atascada en el protagónico de la víctima… Eso es lo que me agota, una vez más la mártir entra en escena, sin dejar salir al felino interno que habita mis entrañas y me mueve de set en set, experimentando el filo de esos riesgos, de esas aventuras. Mi borrego está tan temeroso que sólo quiere vivir en lo conocido, sin moverse más allá de la cerca que conoce… Cuando en realidad lo que siempre he querido es correr, olfatear nuevos descubrimientos y agazaparme en el recorrido de esas pieles llenas de colores y sonidos, olores saborizados y tiempos atemporales.
Lanzarme, saltar y vivir en los límites que desconozco es el miedo constante y el deseo anhelado… Dar el paso atrás no es quedarme con el pasado, sino con lo conocido y lo seguro.
Se agoto el patrón, ya no da para más, no encontrará historia que le cambie de dimensión si se aferra a volver a interpretar a la víctima que tan bien le sale. Se arrojará a lo desconocido, saboreará la posibilidad de vivir de otra manera?... Finalmente es lo que siempre había buscado sin saber en qué consistía su búsqueda.
Lanzarme, saltar y vivir en los límites que desconozco es el miedo constante y el deseo anhelado… Dar el paso atrás no es quedarme con el pasado, sino con lo conocido y lo seguro.
Se agoto el patrón, ya no da para más, no encontrará historia que le cambie de dimensión si se aferra a volver a interpretar a la víctima que tan bien le sale. Se arrojará a lo desconocido, saboreará la posibilidad de vivir de otra manera?... Finalmente es lo que siempre había buscado sin saber en qué consistía su búsqueda.
UNO NO SE EXPLICA SIN LA PRESENCIA DEL OTRO
Entre messenger, links, ensayos y alguien que me compartió parte de su tarde, voy retomando fragmentos de Octavio Paz:
Entre la noche y el día hay un territorio indeciso. No es luz ni sombra: es tiempo.
Yo escribo: hablo conmigo, intentando hablar contigo. Quisiera hablarte.
Me quedan estas palabras: con ellas te hablo.
Yo te hablo: tú no me oyes. No hablo contigo y al hablarte, me vuelvo un murmullo, aire y palabras, un soplo, un fantasma que nace de estas letras.
Tal vez amar es aprender a caminar por este mundo.
Aprender a quedarnos quietos.
Aprender a mirar.
Si el amor comienza con el cuerpo, si el deseo lo inventa, ¿cuándo termina?.
El amor comienza con una atracción física. La costumbre lo mata. Un nudo, vida y muerte: una fiebre, una dolencia, un combate, un frenesí, un estupor, una quimera.
Amar implica arriesgarse, atreverse a vivir, lanzarse a la vida y con ella echarse a los brazos tibios de la muerte también.
Amar: hacer de un alma un cuerpo,
hacer de un cuerpo un alma,
hacer un tú de una presencia.
Amar es perderse en el tiempo,
ser espejo entre espejos.
Es idolatría: endiosar una criatura
y a lo que es temporal llamar eterno.
Todas las formas de carne
son hijas del tiempo,
simulacros.
El tiempo es el mal,
el instante es la caída;
amar es despeñarse:
caer interminablemente,
nuestra pareja
es nuestro abismo.
El instante es “nuestra ración de paraíso”. Amar es entonces, ignorar la sucesión del tiempo cronológico y habitar el tiempo mítico donde el ritmo es circular; como bien lo dijo Kundera: "percibimos la felicidad como la repetición del tiempo". De la misma manera que lo es para la naturaleza, todo es cíclico: amanece y anocheche, vuelve a amanecer y otra vez anochece, de la semilla a la flor y de ella a la semilla, todo se repite incanzablemente; sólo nosotros concebimos el tiempo lineal, queriendo avanzar, ¿hacia dónde?, cuando lo que nos hizo felices está en el ayer.
El tiempo del amor es mítico y no sucesivo; la intensidad de su vivencia posibilita marcar un paréntesis en el tiempo. Amar es desafiar la eternidad. El amor se enfrenta a todo lo establecido, es transgresión al anhelar el instante como una ventana a la eternidad, a pesar de estar sujetos a nuestra identidad mortal, al tiempo, somos capaces de percibir la maravilla platónica de volver a la unidad, de anular la escisión, la separación a la que estábamos condenados: la soledad. La respiramos por cada poro en esos infinitos reflectores de instantáneos simulacros que van construyendo el significado de nuestra vida.
Amar en fuga, porque todo lo que amamos se muere o se va.
La tarde se ha ido a pique, lámparas y reflectores perforan la noche. Yo escribo: hablo contigo: hablo conmigo. Abro la puerta condenada a los recuerdos y los fantasmas del inconsciente.
Entre la noche y el día hay un territorio indeciso. No es luz ni sombra: es tiempo.
Yo escribo: hablo conmigo, intentando hablar contigo. Quisiera hablarte.
Me quedan estas palabras: con ellas te hablo.
Yo te hablo: tú no me oyes. No hablo contigo y al hablarte, me vuelvo un murmullo, aire y palabras, un soplo, un fantasma que nace de estas letras.
Tal vez amar es aprender a caminar por este mundo.
Aprender a quedarnos quietos.
Aprender a mirar.
Si el amor comienza con el cuerpo, si el deseo lo inventa, ¿cuándo termina?.
El amor comienza con una atracción física. La costumbre lo mata. Un nudo, vida y muerte: una fiebre, una dolencia, un combate, un frenesí, un estupor, una quimera.
Amar implica arriesgarse, atreverse a vivir, lanzarse a la vida y con ella echarse a los brazos tibios de la muerte también.
Amar: hacer de un alma un cuerpo,
hacer de un cuerpo un alma,
hacer un tú de una presencia.
Amar es perderse en el tiempo,
ser espejo entre espejos.
Es idolatría: endiosar una criatura
y a lo que es temporal llamar eterno.
Todas las formas de carne
son hijas del tiempo,
simulacros.
El tiempo es el mal,
el instante es la caída;
amar es despeñarse:
caer interminablemente,
nuestra pareja
es nuestro abismo.
El instante es “nuestra ración de paraíso”. Amar es entonces, ignorar la sucesión del tiempo cronológico y habitar el tiempo mítico donde el ritmo es circular; como bien lo dijo Kundera: "percibimos la felicidad como la repetición del tiempo". De la misma manera que lo es para la naturaleza, todo es cíclico: amanece y anocheche, vuelve a amanecer y otra vez anochece, de la semilla a la flor y de ella a la semilla, todo se repite incanzablemente; sólo nosotros concebimos el tiempo lineal, queriendo avanzar, ¿hacia dónde?, cuando lo que nos hizo felices está en el ayer.
El tiempo del amor es mítico y no sucesivo; la intensidad de su vivencia posibilita marcar un paréntesis en el tiempo. Amar es desafiar la eternidad. El amor se enfrenta a todo lo establecido, es transgresión al anhelar el instante como una ventana a la eternidad, a pesar de estar sujetos a nuestra identidad mortal, al tiempo, somos capaces de percibir la maravilla platónica de volver a la unidad, de anular la escisión, la separación a la que estábamos condenados: la soledad. La respiramos por cada poro en esos infinitos reflectores de instantáneos simulacros que van construyendo el significado de nuestra vida.
Amar en fuga, porque todo lo que amamos se muere o se va.
La tarde se ha ido a pique, lámparas y reflectores perforan la noche. Yo escribo: hablo contigo: hablo conmigo. Abro la puerta condenada a los recuerdos y los fantasmas del inconsciente.
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